viernes, 29 de julio de 2011

AGRADECIMIENTOS

Gracias Felipe por la corrección ortográfica que me haces, fue tanta la emoción, que se me olvido hasta el diccionario.

viernes, 22 de julio de 2011

Borges y Rulfo

Espero que los lectores sientan lo que sentí al leer este artículo, la verdad se me pusieron los pelos de punta, y sin exagerar, de la emoción se me chocolatiaron los ojos. Que lección  de humanidad, nos dan estos dos maestros. Eso es la literatura.
 
BORGES Y RULFO

La inmortalidad y otras fatigas

Jorge Luis Borges visitó la ciudad de México en 1973. Amable, accedió a todos los "impiadosos compromisos" que, según sus palabras,"confundían a un modesto autor con un pésimo actor". De la breve entrevista que sostuvo con el Licenciado Luis Echeverría se sabe poco. El extinto periodista colombiano Miguel Cantero le preguntó meses después por la impresión que le causó el mandatario. A lo cual Borges respondió: "Nunca me tome en serio. Pero si ése es el presidente, prefiero no imaginar al gobierno". A su llegada al país, el escritor argentino "pidió un favor" a sus anfitriones. Quería hablar con Juan Rulfo. Le sugirieron entonces un desayuno. "Pido clemencia -respondió-. Prefiero los atardeceres. Las mañanas me derrotan. Ya no tengo el brío ni las fuerzas para entregar al día lo que se merece. Hoy el crepúsculo me sienta mejor. Sólo quiero conversar con mi amigo Rulfo".
Reproducimos la conversación sin reclamo alguno de precisión. Las fuentes son demasiado vagas para permitirlo:
RULFO: Maestro, soy yo, Rulfo. Que bueno que ya llegó. Usted sabe como lo estimamos y lo admiramos.
BORGES: Finalmente, Rulfo. Ya no puedo ver a un país, pero lo puedo escuchar. Y escucho tanta amabilidad. Ya había olvidado la verdadera dimensión de esta gran costumbre. Pero no me llame Borges y menos "maestro", dígame Jorge Luis.
RULFO: Que amable. Usted dígame entonces Juan.
BORGES: Le voy a ser sincero. Me gusta más Juan que Jorge Luis, con sus cuatro letras tan breves y tan definitivas. La brevedad ha sido siempre una de mis predilecciones.

RULFO: No, eso sí que no. Juan, cualquiera, pero Jorge Luis, sólo Borges.
BORGES: Usted tan atento como siempre. Dígame, ¿cómo ha estado últimamente?
RULFO: ¿Yo? Pues muriéndome, muriéndome por ahí.
BORGES: Entonces no le ha ido tan mal.
RULFO: ¿Cómo así?
BORGES: Imagínese, don Juan, lo desdichado que seríamos si fuéramos inmortales.
RULFO: Sí, verdad. Después anda uno por ahí muerto haciendo como si estuviera uno vivo.
BORGES: Le voy a confesar un secreto. Mi abuelo, el general, decía que no se llamaba Borges, que su nombre verdadero era otro, secreto. Sospecho que se llamaba Pedro Páramo. Yo entonces soy una reedición de lo que usted escribió sobre los de Comala.
RULFO: Así ya me puedo morir en serio.

Tomado de la revista trimestral Fractal. l


RULFO EN COLOMBIA

RULFO EN CALI

Este es el título que Eduardo Cruz da a un artículo en el que hace referencia a una entrevista que a finales de los setenta hace Gloria Valencia de Castaño a Juan  Rulfo en Cali durante el Encuentro de Narrativa Hispanoaméricana. Transcribo las pregunta y respuestas, segun Ecuardo  Cruz fueron las más relevantes:

–Por ejemplo su último libro, usted contestó con su humor que, por cierto lo tiene a flor de piel y que le sale duro muchas veces, contestó que su libro Cordillera se había quedado “en cerro”. ¿Qué nos quiso decir?
Bueno, que desapareció, desapareció definitivamente.
–¿De verdad lo destruyó?
Lo destruí, sí, lo tiré a la basura, pues no llenaba, no me satisfacía, era una cosa que me llevó a un callejón sin salida.
En otro momento del diálogo en el estudio, intervino el escritor Manuel Mejía Vallejo.
–Usted tiene en su obra un aspecto permanente sobre la soledad y la muerte. A veces, cuando lo veo, me lo imagino como un fantasma creado por usted mismo.
Así soy, un fantasma, no existo, es un mito la existencia, mi existencia. A veces pienso que no existo.

Producto de dicho encuentro, dice el artículo, que en los registros sonoros de la Universidad del Valle la voz del autor.


Dijo: “Yo estuve buscando muchos editores y no me quisieron publicar hasta el año ’53. Yo ya tenía escrita mentalmente el Pedro Páramo. Considero incluso que Pedro Páramo es anterior a los cuentos. El resultado fue que no encontraba la fórmula para contarla. Al escribir los cuentos, me dediqué a hacer una especie de ‘ejercicios literarios’ hasta que por fin encontré, en un cuento que se llama “Luvina”, la atmósfera que yo necesitaba para escribir Pedro Páramo. Así es que si se publicaron primero los cuentos, fue porque ya había los suficientes medios para hacerlo, y entonces me dediqué exclusivamente a escribir la novela. En lo personal, y es una cosa que siempre me he reservado, Pedro Páramo es anterior a El Llano en llamas. Me quedaba entonces después del trabajo a escribir. No tenía amigos ni a dónde ir, así que escribí una novela que titulé provisionalmente El hijo del desaliento. Fue una novela que, como ustedes pueden suponer, fue a parar a la basura, como otras que también fueron a parar al mismo lugar. [...] La novela mexicana ha caído en el terreno de la pornografía, el escándalo y la comercialización. Grijalbo, por ejemplo, ha incrementado este tipo de literatura. Si antes vendía bestsellers norteamericanos, ahora vende escándalo. Han aparecido seis u ocho escritores que exclusivamente escriben eso. Una novela llena de vulgaridades, pero como se dice, de sal, de pimienta, que llama la atención y que el público que no lee literatura la consume. Así como se venden los cómics, así se venden esas obras. Puedo citar nombres: Parménides García Saldaña, Gustavo Sáinz, José Agustín, Luis Zapata; bueno, tres o cuatro más que escriben pornografía absoluta. No tienen nada de literario sus obras. [...] Para mí, el acierto más grande de Carlos Fuentes fue La muerte de Artemio Cruz. En cambio Terra nostra está plagada de esa obsesión en él, hacer farragosa alguna cosa. Tiene una particularidad Carlos Fuentes: no sacrifica nada. No tacha nada de lo que escribe, porque cree que cualquier línea es valiosa y eso le ha perjudicado, sobre todo en Terra Nostra que podría haber sido una novela magnífica. Se le fue de las manos… El defecto que yo le veo a esta novela es esa falta de crítica que nos sobra a algunos. Fuentes debería de concretarse a lo que conoce, que es la historia de México. El problema es que él no conoce su país. Al principio quiso imitar a su padrino Octavio Paz, pero lo ha superado en muchos aspectos, sobre todo en el terreno de la ficción. Lo que me molesta de Fuentes es que él trabaja sus obras con el conocimiento y no con la imaginación. Y esto es una falla.”

Ver araticulo completo en: 
http://www.jornada.unam.mx/2011/06/19/sem-eduardo.html 


jueves, 21 de julio de 2011

El desafio de la creación - Juan Rulfo (Reseña)


RULFO, Juan. El desafío de la creación. 

En este artículo Juan Rulfo  dice que uno de los principios de la creación literaria es la invención, la imaginación. “Somos mentirosos; todo escritor que crea es un mentiroso, la literatura es mentira; pero de esa mentira sale una recreación de la realidad;  recrear  la  realidad es, pues, uno de los principios fundamentales de la creación”.
Dice Rulfo  que para contar una historia  hay tres puntos de apoyo: primero, crear el personaje; segundo, crear el ambiente donde se va a mover ese personaje y tercero, cómo va a hablar ese personaje, cómo se va a expresar.
Como escritor, el autor de Pedro Páramo no cree en la inspiración. Dice que jamás a creido en la inspiración y que eso de escribir es un asunto de trabajo. Se logra crear lo que se puede decir, afirma Rulfo, lo que, al final, parece que sucedió o pudo haber sucedido, o pudo suceder pero nunca  ha sucedido-
Lo primero en Juan Rulfo es la imaginación, que circula entre la creación del  personaje, del ambiente donde se mueve ese personaje y la forma como éste va a hablar, “la imaginación es infinita, no tiene límites”. Después de la imaginación aparece la intuición, la intuición lo lleva a uno a pensar algo que no ha sucedido, pero que está sucediendo en la escritura.
El trabajo de la escritura se concreta para Juan Rulfo en la imaginación, la intuición y una aparente verdad.
Otro elemento importante que plasma el autor de El desafío de la creación es, dice, el querer contar algo sobre ciertos temas, que para Rulfo no son más que tres: el amor, la vida y la muerte ; aunque en entrevista realizada en 1966 por el reportero Enrique Santos hace referencia a parte del amor y la muerte, a los temas de la injusticia y del sufrimiento, dice: "Los problemas humanos son iguales en todas partes. No son temas nuevos el amor, la muerte, la injusticia, el sufrimiento, que están sugeridos en Pedro Páramo"(1) y encontrarlo (el tema) es uno de los problemas en la creación literaria, sumándole a ello el personaje y que va a decir ese personaje, cómo va  a adquirir vida.
Como autor de cuento y novela, en el texto que se reseña  el autor establece la diferencia entre estos dos géneros literarios, dice Rulfo: “Para mí el cuento es un género realmente más  importante que la novela por que hay que concentrarse en una cuantas páginas para decir muchas cosas, hay que sintetizar, hay que frenarse: en eso el cuentista se parece mucho al poeta, al buen poeta.
Este artículo es importante y una muy buena referencia para quienes gustan de leer y escribir  cuento corto.

 (1) http://www.elligue.com/thread/rulfo-y-garcia-marquez-comala-y-macondo-12298-0.html

El texto completo del artículo se encuentra en el siguiente link:
 http://www.ciudadseva.com/textos/teoria/opin/rulfo1.htm

RULFO Y LA HISTORIA

En charla pronunciada por Juan Rulfo en 1983 en la Universidad de Colima, un estudiante le preguntó por qué era importante estudiar la historia, a lo que Rulfo le contesto no sin ironía: "No me venga usted con cuentos". "El que no conoce su historia, su pasado, no tiene identidad alguna. Es un hombre que está volando en las nubes, está navegando en un vacío, está simplemente fuera del mundo y de la sociedad en que vive".

Transcripción de una conferencia  sobre la historia de Colima, dictada por Juan Rulfo en diciembre de 1983. Juan Rulfo. Dónde quedó nuestra historia. 2da. edición ampliada. Colima. Univesidad de Colima, 1986, pp. 26-51 (Colección Rajuela). Citado por: María Xóchitl Galindo Villavicencio. EN: Presentación de Nuevos indicios sobre Juan Rulfo. Genealogía, estudios, testimonios. de Jorge Zepeda (Coordinador)

RULFO Y LOS INTELECTUALES


RULFO Y LOS INTELECTUALES
“[…] sino que les estoy hablando de una forma muy elemental, porque yo le tengo mucho miedo a los intelectuales, por eso trato de evitarlos; cuando veo a un intelectual, le saco la vuelta, y considero que el escritor  debe ser el menos intelectual de todos  los pensadores, porque sus ideas y sus pensamientos son cosas muy personales que no tienen porque influir en los demás ni hacer lo que quiere que hagan los demás;  cuando se llega a esa conclusión , cuando se llega a ese sitio, o llamemos final, entonces siente uno que algo se ha logrado”.
RULFO, Juan. El desafío de la creación.

POR QUÉ LEER

"La crítica  orientada al lector se basa en nociones de la experiencia del lector, referidas a lo que un lector encuentra, siente, se pregunta, conjetura, concluye, para justificar sus ideas sobre  el significado y estructuras de las obras literarias. Un lector informado hace todo lo que esté a la mano para informarse. De ahí que el sentido dado a la obra dependa de la experiencia del lector informado. (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 88)

 "El hombre construye cosas porque está vivo, pero escribe libros porque se sabe mortal. Vive en grupos porque es gregario, pero lee porque se sabe solo. La lectura es una compañía que no ocupa el lugar de ninguna otra y a la que ninguna compañía distinta podría reemplazar. No le ofrece ninguna explicación definitiva sobre su destino, pero teje una retícula apretada de complicidades que hablan de felicidad paradójica de vivir, al tiempo que iluminan  el absurdo trágico de la vida. De modo que nuestras razones para leer son tan extrañas  como nuestras razones para vivir. Y a nadie se le ha otorgado poder para reclamarnos cuentas por esta intimidad. (Daniel Pennac citado por: MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 30)

"Leer es pues, desde Pessoa, un alejarse de la oscura, de la asesina ignorancia". (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 15)
"Para Pessoa, el segundo 'asesino' a combatir  es el 'Fanatismo'; así con mayúscula, porque no hay mejor aliado de éste que la 'Ignorancia', también con mayúscula,y ambos son los peores enemigos  de los espíritus libres".  (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 15).

La lectura como las cosas, dirá Pessoa en 1912, no tienen significado: tienen existencia,. (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 18)

 No existe tanta tolerancia como en el acto de leer, Por eso en  buena parte la lectura cumpli una función catártica, liberadora, de democracia participativa y comunicativa. (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág.22)

"La lectura no es ni profesión ni obligación, sino una vocación, una actitud de diálogo permanente con el universo" (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 23)

"El libro es una extensión de la memoria y de la imaginación". (MESA ESCOBAR, Augusto. Literatura  y educación. Colección jornadas de literatura. Comfama. Medellín, 2004. Pág. 23)



SÁBATO

"Leer les dará una mirada más abierta sobre los hombres y sobre el mundo, y los ayudará  a rechazar la realidad como un hecho irrevocable".

lunes, 18 de julio de 2011

BORGES: frases y párrafos

Pensar, analizar, inventar (me escribió también) no son actos anómalos, son la normal respiración de la inteligencia. (Pierre Menard, autor del Quijote)

A las nueve o diez noches comprendió  con alguna amargura que nada podía esperar de aquellos alumnos que aceptaban con pasividad su doctrina y si de aquellos que arriesgaban, a veces, una contradicción razonable. Los primeros, aunque dignos de amor y buen afecto, no podían ascender a individuos; los últimos preexistían un poco más... (Las ruinas circulares)

JUAN RULFO: frases y párrafos

Nunca había  sentido que fuera más lenta y violenta la vida como caminar entre un amontonadero de gente; igual que si fuéramos un hervidero de gusanos apelotonados bajo el sol, retorciéndonos entre la cerrazón del polvo que nos encerraba a todos en la misma vereda y nos llevaba como acorralados.  (Talpa)

VARIOS; frases y fragmentos

Era, sobre todo, una belleza para hombres, sin ser en lo más mínimo provocativa; y esto es precisamente lo que no entederían nunca las mujeres. (HORACIO QUIROGA. La muerte de isolda )

"Cuan imprudente es aquel que no llega a un pacto con sus ojos". (THÉOPHILE GAUTIER. La muerta enamorada)
Y en el contorno de su alta frente, en los bucles de su sedosa cabellera, en sus pálidos dedos que se sepultaban dentro de ella, en el triste tono bajo y musical de su palabra, y por encima de todo -¡oh, por encima de todo!- en las frases y expresiones de la muerta sobre los labios de la amada, de la viva, encontraba yo pasto para un horrendo pensamiento devorador, para un gusano que no quería perecer.  (EDGAR ALLAN POE. Morella)

 Finalmente tomé la decisión  que consideré más conveniente y preferible a todas las soluciones anteriores: emparedarlo en el sótano como se dice que hacían en la Edad Media los monjes con sus víctimas. (EDGAR ALLAN POE. Gato negro)

El hombre no se rinde a los ángeles, ni totalmente a la muerte, sino por la flaqueza de su débil voluntad.  (EDGAR ALLAN POE. Los crímenes de la calle Morgue)

Sin embargo, calcular no es lo mismo que analizar. Por ejemplo, un jugador de ajedrez realiza lo primero sin esforzarse en lo segundo. Y en consecuencia, debe deducirse que el juego de ajedrez, en sus efectos sobe el carácter mental se interpreta erróneamente. (EDGAR ALLAN POE. Los crímenes de la calle Morgue)

La verdad no está siembre en el fondo de un pozo. En realidad,  y en lo que concierne a lo que más importa conocer, creo que la realidad es siempre superficial. (EDGAR ALLAN POE. Los crímenes de la calle Morgue)


Las carencias son madres de los excesos (MARCO T.  AGUILERA. Amor contra natura)

El amor es como el pan: tiene su punto. (MARCO T.  AGUILERA. Amor contra natura)

Una vez tomada la determinación, debía  cumplirla, no importa lo que sucediera. (MARCO T.  AGUILERA. Historia de un orificio)

Don Marcial no se sentía bien. Al arreglarse la corbata frente a la luna de la consola se vio congestionado. Bajó  al despacho donde lo esperaban hombres de justicia, abogados y escribientes, para disponer la venta  pública de la casa. Todo había sido inútil. Sus pertenecías se irían a manos del mejor postor, al compás del martillo golpeando una tabla. Saludó y le dejaron solo. Pensaba en los misterios de la letra escrita, en esas hebras negras que se enlazan y desenlazan sobre anchas hojas  afiligranadas de balanzas, enlazando y desenlazando compromisos, juramentos, alianzas, testimonios, declaraciones,apellidos, títulos, fechas, tierras, árboles y piedras, maraña de hilos, sacada del tintero, en que se enredaban las piernas del hombre, vendándole caminos desestimados por la Ley; cordón al cuello, que apretaba su sordina  al percibir el sonido  terrible de las palabras en libertad. Su firma lo había traicionado, yendo a complicarse en nudo y enredos de legajos. Atado por ella, el hombre de carne se hacía hombre de papel. (ALEJO CARPENTIER. Viaje a la semilla)



A quien no lo siente, no es posible hacerlo comprender: (Kafka. Un artista del hambre)

A la larga, la vida va hoy tan rápidamente, la despreocupada inconsciencia es tan grande, son tantas las diversiones. (LIsle Adam. Amigas de pensionado).

viernes, 15 de julio de 2011

JUAN RULFO: Talpa

JULIO CORTAZAR: Párrafos y frases

La gente no es mala, y muchas desatenciones se cometen porque no se está  en lo que se hace; igual ocurre en el auatobus, en los almacenes y en las oficinas. (Los buenos servicios)

Esto no es un modo de decir, cuando veo algo raro siempre me pregunto con todas las letras si estoy soñando. (Los buenos servicios)

No era pensasr, me parece que ya te he dicho muchas veces que yo no pienso nunca; estoy como parado en una esquina viendo pasar lo que pienso, pero no pienso lo que veo. ¿Te das cuenta? Jim dice que todos somos iguales, que en general (asi dice) uno piensa por su cuenta. (El perseguidor)

En realidad las cosas verdaderamente difíciles son otras tan distintas, todo lo que la gente cree poder hacer a cada momento. Mirar, por ejemplo, o comprender a un perro o a un gato. Ésas son las dificultades, las grandes dificultades. (El perseguidor)

Vienen las  palabras... No, no son las palabras, son lo que está en las palabras. (El perseguidor)

Un pobre diablo de inteligencia apenas mediocre, dotado como tanto músico, tanto ajedrecista y tanto poeta  del don de crear cosas estupendas sin tener la menor conciencia. (El perseguidor)

MANUEL MEJÍA VALLELJO: Párrafos y frases

La vida es hermosa si está junto a la muerte. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: La muerte de Pedro Canales. Ediciones diálogo. Pág. 23)

Porque matar a un hombre equivale a matar un mundo, clausura otras posibilidades. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: Palo caído. Ediciones diálogo. Pág. 53)

Pero siempre hay puñaladas para detener puñaladas o disparos. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: La venganza. Ediciones diálogo. Pág. 80).

Todos venimos del mar, desde mucho antes de que existiéramos. Cuando no existíamos, el mar nos esperaba para que algún día llegáramos a ser. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: Langostas azules. Ediciones diálogo. Pág. 127)

El sueño acaba con la vida del que no sabe soñar. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: Langostas azules. Ediciones diálogo. Pág. 129).
El hombre viaja para venir al mundo y sigue viajando para salir de él. (MEJÍA VALLEJO, Manuel. Antología de cuentos. Cuento: Contra viento y marea. Ediciones diálogo. Pág. 118)

MARIO ESCOBAR VELÁSQUEZ: Párrafos y frases

"A la equivocación se llega por pasión y no por ignorancia" (Antología comentada del cuento Antioqueño)

Entre el nacimiento y la muerte está la vida que es una pelea dura y una derrota sentenciada. ( ¿Qué es un siglo patrón?)

Porque las cosas inertes perduran y sólo el hombre es transitorio. (¿Qué es un siglo patrón?)

Cada uno es sabio de la sabiduría que escoge. (De la raza de Kaín)

Todo se puede si se piensa. (Las causas del llanto)

La eternidad es la simultaneidad del tiempo. No hay ayer, ni mañana. Todo es hoy. (Un escolástico. El de Kerioth)

Porque estar en algunas compañías no es dejar de estar solos. (Violeta)

Un ser enfermiso no se empreña ―salvo el ser humano que es medio estúpido―. (Gato)

Vale más tener las ganas que quitarlas. (De la raza de Kaín)

La edad es también una filosofía de la posesión: nada es propio. Las cosas no  se tienen. Apenas están con uno un tiempo. Los lugares no son propios:  uno los atraviesa un tiempo, y luego desaparece. Pero los lugares permanecen. (Gato)

Nada vale nada si uno no es capas de arriesgarlo. (Gato)

Y así es como se siente mejor la vida: asumiéndola.(Gato)

Contó hasta  doce flores en la vara. "Crecen solos, ―dijo―, los mima el viento y los mece. El viento es un viejo amador de libros. Crecen porque la belleza no requiere de los ojos del hombre. Pero cuando dan con ella, los mios quieren llorar. Lo hermoso duele. (Historias del bosque hondo, Introducción).

Y agregó: "Quien se descuida en el monte no hace huesos viejos".  (Historias del bosque hondo, Introducción).

Recuerdo que cuando recolectó esa miel, me llevó consigo. Tendría yo seis años. Acaso un poco más. El tiempo se desdibuja. La infancia no tiene años sino recuerdos. La infancia verdadera es la ignorancia del tiempo. (Historias del bosque honde, Introducción).

 
 
Las cosas inertes perduran, y sólo el hombre es transitorio. (Qué es un siglo patrón)

Acá no vive usted, sino que está. (Con sabor a fierro)

Las cosas inertes perduran, y sólo el hombre es transitorio. (Qué es un siglo patrón)

Acá no vive usted, sino que está. (Con sabor a fierro)

Las balas andan más que el miedo. (Con sabor a fierro)

La voz de la dinamita camina mucho. (Con sabor a fierro)

SALUDO DE BIENVENIDA

Bienvenidos a cuentosdelcuento, un espacio para compartir el fascinante mundo del cuento corto. En él se publicarán cuentos, artículos, ensayos, anécdotas, videos e imágenes sobre este género literario.